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NUESTRA OPINIÓN

LO QUE ANDA MAL EN CASA.

By July 4, 2009September 16th, 2011No Comments
 A Manolín no lo ponen en la radio de Miami.

A Manolín no lo ponen en la radio de Miami.

La escasa presencia en la radio de Miami, de la música de interpretes  formados tras el triunfo de la revolución de Fidel Castro, en 1959, y que emigraron a  Estados Unidos u otros lugares del mundo, es una manifestación discriminatoria, que tiene su explicación lógica en el trasfondo político del fenómeno en cuestión.

El hecho de que la deserción de muchos de ellos acapare los principales titulares de la radio,la televisión y la prensa escrita miamense, en su momento, no significa que sus directivos, estén plenamente identificados con el compromiso de difundir sus canciones, porque  la gritería sólo forma parte de la política de descrédito al régimen de La Habana.

Esos señores, defensores a capa y espada de la democracia, consideran que la música y cualquier otra manifestación cultural, desarrollada hoy en Cuba, pertenece a Fidel y responde a los intereses ideológicos del comunismo y por esa razón no escuchamos en el espectro radiofónico local ni a los cantantes que escaparon de la isla.

Privar a nuestros interpretes de la posibilidad de  una mayor representatividad en la radio del sur de la Florida es sin lugar a dudas una injusticia y expresa los sentimientos prejuiciados de las persona responsabilizadas con la programación y de un sector minoritario de la comunidad de exiliados de nuestro país

Hay quienes culpan a las organizaciones integradas al llamado exilio de línea dura y no están lejos de la verdad, porque ciertamente son ellos quienes influyen de manera determinante en las decisiones, mientras por otra parte la mayoría de los propietarios de esas emisoras esgrimen los mismo desacertados criterios.

Es por eso que apenas oímos por la radio de Miami las voces de  Pancho Céspedes, Amaury Gutiérrez, Manolín, Issac Delgado y otras muchas afamadas figuras que están entre nosotros y en otros sitios del mundo, y que a mi juicio merecen igual reconocimiento, que aquellos interpretes  nacidos o criados en esta tierra.

Este es el momento de librarnos de las atadura que frustan la participación en la radio de esos expontes de la más reciente música hecha en la Cuba de hoy, que no tiene nada de Fidel, ni de comunismo, ni la cabeza de un guanajo, porque a mi entender este es un género universal y su difusión no implica confrontación política.

Si los que abandonan la isla, no tiene en la radio miamense un espacio donde expresar su arte, entonces de que vale el intercambio cultural entre Cuba y Estados Unidos, planteado a partir de la llegada al poder de Barack Obama. A  no ser que enmendemos de una vez,” lo que anda mal en casa.”

07/05/2009 Publicado por albertodenis | AL DIA | | 1 comentario | Editar.