Es la semana más intensa del Año Litúrgico.
La Paisión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret, deviene la conmemoración anual conocida como Semana Santa, en el contexto de un período de intensa actividad litúrgica de profundo arraigo en las muy diversas denominaciones cristianas, y por lo general comienza el Domingo de Ramos.
En la etapa que se desarrolla entre los meses de marzo y abril precedido por la cuaresma tienen lugar numerosas muestras de religiosidad popular, destacando las procesiones y las representaciones de la Pasión, aunque en algunos lugares del mundo la celebración se inicia durante el llamado Viernes de Dolores.,
En todos los casos la evocación de la mundialmente memorable efemérides finaliza el Domingo de Resurreción e incluye el jueves, el viernes y el sábado santos, donde se conmemora la Crucifixión de Jesús y Cristo en el sepulcro, que son los días más importantes, y a su vez forman el conocido Triduo Pascual.
La Semana Santa abarcada además el lunes que es cuando el enviado de Dios expulsa a latigazos a los mercaderes del Templo de Jerusalén, el martes anticipa a sus discípulos las Negaciones de San Pedro y la traición de Judas Iscariote, quien el miércoles conspira con el Sanedrín por treinta monedas de plata.
Las Pascuas como también se conoce la Semana Santa, es una celebración cambiante en su fecha, pues está basada en el calendario Judío que se guía por la luna y en esta ocasión se efectua del 24 al 31 de marzo, con el dato histórico de la asunción al trono de la Iglesia Católica del primer papa de origen latino.
Además de su carácter religioso, la Semana Santa también es considerada como un acontecimiento cultural, popular y de atracción turística en muchas regiones del mundo moderno como es el caso de Vivero, en la provincia española de Lugo, que sobresale por su valor artístico, sobriedad y austeridad sin límite.