Era adicta a la metanfetamina y no quería a sus bebés
Megan Huntsman, de 39 años, se declaró culpable de matar a sus seis hijos recién nacidos y ocultar los cuerpos en la cochera de su domicilio en Pleasant Grove, Utah, al oeste de Estados Unidos, según un despacho del portal Terra.
Huntsman dijo a la policía que estranguló o asfixió a los bebés inmediatamente después de nacer, los envolvió en telas, los colocó en bolsas de plástico y los depositó en cajas durante un periodo que se extendió de 1996 a 2006.
Los restos de los pequeños fueron descubiertos en abril de 2014 por Darren West, ex-esposo de Huntsman, poco después de ser liberado de una prisión federal en la que estuvo recluido durante ocho años por delitos de drogas.
Era padre de todos los bebés y vivió con Huntsman durante la década en que murieron los niños y luego de hallar el primer cuerpo en una pequeña caja de cartón llamó a la policía. que encontró los restantes, siete en total, uno de los cuales dijeron murió al nacer.