Es una enfermedad que se presenta en forma de forúnculos.
La mosca Dermatobia hominis es su agente trasmisor.
Una nueva investigación revela que el aumento en las precipitaciones y los cambios en la estructura vegetal en los bosques argentinos, provoca un aumento de parasitismo de larvas de mosca en las aves en la etapa de anidación y esta es una mala noticia para la diversidad de las especies.
En las zonas templadas y tropicales de las Américas, los pollitos de las aves silvestres están a merced de las moscas parasitarias y estos insectos tienen larvas que se introducen bajo su piel con el propósito de alimentarse de la carne, causando una enfermedad conocida como miasis subcutánea.
Los científicos llevaron a cabo una investigación de seis años de la epidemiología de miasis en aves silvestres y más de cuatro mil pollos fueron grabados y se examinaron las condiciones que pueden haber llevado a la abundancia de los parásitos en las zonas más altas de los bosques.
“Si analizamos estos resultados con los de estudios anteriores, las perspectivas son ideales para los parásitos y terrible para las aves”, dijo Pablo Beldomenico, uno de los investigadores, quien apuntó :“Las proyecciones de cambio climático para la región son de grandes precipitaciones y temperaturas más altas”.
Los hallazgos aparecen publicados en la revista PLoS ONE y el estudio arrojó en consecuencia que la poblacion de aves de la zona boscosa argentina se están quedando sin hábitat forestal para anidar y, como resultado, sus crías se apiñan y este escenario favorece la proliferación de parásitos en los polluelos.
Los resultados muestran un panorama bastante sombrío para el futuro de las especies de aves en estas áreas por cuya razón es posible que a medida que el clima continúe presentado deterioro, habrá una mayor mortalidad que, a su vez, podría cambiar la composición de los ecosistemas en espacios arbolados de Argentina.
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