La legislación no eliminaría la Ley de Ajuste Cubano vigente desde 1966, sino que permitirá que los cubanos que realmente demuestren que son perseguidos políticos puedan acceder a los beneficios otorgados por Estados Unidos, según publica hoy la página digital Martinoticias.
Así terminaría la elegibilidad automática para recibir asistencia pública para ciudadanos cubanos como parte del Programa de Reasentamiento de Refugiados, que aborda los abusos bien documentados de los beneficios federales y salvaguarda los fondos de los contribuyentes estadounidenses.
Rubio de origen cubano, culpó al presidente Barack Obama del éxodo masivo que protagonizan nacionales de la isla caribeña, al plantear que el mandatario actuó de manera imprudente al convertise en figura clave del restablecimiento de relaciones entre Washington y La Habana, en diciembre de 2014.