Ganó el premio al Novato del Año en 2014.
José Dariel Abreu es el primer cubano formado en el béisbol que se juega en la isla caribeña en alcanzar el reconocimiento en las Grandes Ligas.(Foto Internet)
El inicialista de los Medias Blancas de Chicago, José Dariel Abreu, ganó el premio al Novato del Año de la Liga Americana, para convertirse en el segundo jugador cubano en alcanzar ese mérito de forma consecutiva en el mejor béisbol del mundo.
Abreu, protagonizó una verdadera hazaña deportiva al encabezar a la totalidad de los toleteros de las Grandes Ligas con su porcentaje de slugging de .581 y terminar detrás del venezolano Víctor Martínez con un OPS (porcentaje de embasarse más slugging) de .964, en su primera campaña.
Al totalizar 36 cuadrangulares el cubano fijó un récord para un principiante de los Medias Blancas y al impulsar 107 carreras y elevar a 317 su promedio individual alcanzó el cuarto y quinto lugares, respectivamente en el Joven Circuito.
Devino el primer novato en la historia de Grandes Ligas en finalizar entre los primeros cinco jugadores en las categorías por la Triple Corona de bateo, y participo en el Juego de las Estrellas, junto a otros cuatro peloteros de la mayor de las Antillas.
El domingo 27 de abril de 2014 Pito Abreu estableció marca de carreras remolcadas (29) por un recien llegado a la Gran Carpa en el primer mes con un jonrón de dos carreras, su décimo de la temporada para sobrepasar por dos al estelar Albert Pujols,(27) en 2001.
Por sus impresionates resultados la revista especializada Sporting News le confirió idéntica distinción y fue nominado al Premio Hank Aaron que se otorga cada año en las Grandes Ligas al mejor jugador por su desempeño con el madero.
Baluarte ofensivo de una oleada de cubanos que causan sensación, José Abreu, firmado por 68 millones de dólares, se adjudicó unanimente el preciado galardón al erigirse como uno de los bateadores más peligrosos en las Grandes Ligas, .
En 2013 el picher José Fernández, de los Marlins de la Florida mereció el alto reconocimiento otorgado por la Asociación de Cronistas de Béisbol de Norteamérica (BBWAA), Tony Oliva en 1964 con Minnesota y José Canseco en 1986 con Oakland Athletics, todos nacidos en Cuba.
