Fallecieron ahogados durante la crecida de un río.
Cuerpos de algunos de los cubanos que murieron / Foto: Cortesía
La crecida de un rió en la intricada selva de Darién provocó la muerte de al menos 57 emigrantes, entre cubanos y haitianos, cuyos cuerpos fueron enterrados en una fosa común en la localidad panameña de Bajo Chiquito.
Los migrantes nacidos en la Isla, 12 en total fueron reportados como desaparecidos el 23 de abril último por sus familiares, según confirmó Luis Guerrero Anaya, delegado de la Asociación de Derechos Humanos de Costa Rica.
Néstor Ferrer Sánchez y su esposa, lograron escapar de la fuerza de las agua y sin conocer la tragedia ocurrida a los demás, continuaron el camino, y diez días después llegaron a la frontera con el país centroamericano y conocieron la triste noticia.
Al ser consultado por la identidad de los cubanos, el delegado de la Asociación de Derechos Humanos de Costa Rica fue claro al expresar:«Por respeto a los familiares, y en atención a los protocolos para estos casos, esa información no se la puedo dar».
Informó que está en diligencias con la embajada de Panamá en Costa Rica, para iniciar el rescate de los cuerpos y proceder a su identificación, precisa un despacho difundido por el por el portal de noticias online Diario de Cuba.
El área selvática y pantanosa de Darién, ubicada en el límite de Panamá y Colombia, carecen de comunicación por carretera y cubanos y otros emigrantes lo utilizan como corredor natural para llegar a Estados Unidos a riesgo de sus vidas.
