Murió uno de sus grandes jugadores.
Edwin Walter Porteu será recordado siempre porque tuvo la virtud de ser bueno como pelotero y como ser humano.
Ervin El Roy Walters Porteaus, o simplemente Edwin Walters, El Gigante, La Montaña, La novena torre del Palmar del Junco falleció en Matanzas a la edad de 83 años para ascender al salón de los grandes de la pelota cubana de todos los tiempos.
Este martes 24 de abril de 2018 murió víctima de un infarto cardíaco en el central España, del municipio matancero de Perico, donde residía, el hombre que inició el listado de los líderes de bateo de los Campeonatos Cubanos de Béisbol en 1962.
Como jugador activo tuvo notas sobresalientes en los campeonatos azucareros de Camagüey, su provincia natal, en la fuerte Liga de Pedro Betancourt y en la de Quivicán, así como en las Series Nacionales del Béisbol Revolucionario.
En el primera de ellas alcanzó el liderazgo de bateo con promedio de 367 vistiendo la franela del campeón Occidentales, que lo llevó a integrar el eq
uipo Cuba a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Jamaica, en 1962.
Jugando con el equipo del Central España Walter en sus cinco años en la Liga de Pedro Betancourt el Gigante de Céspedes promedió para 360 de average, sólo superado por Mariano Álvarez, quien en igual tiempo promedió 421.
Mi mejor año bateo con 451 fue en 1958 cuando me llevé la triple corona.”, dijo en una entrevista, sinembargo lo que siempre lo llenó de regocijo fue aquel campeonato de bateo de la primera Serie Nacional de la pelota cubana.
“yo vine a conseguir el título en mi última vez al bate, porque de día jugaron Orientales y Azucareros y Ramón Echavarría bateó de 4-4 y se me fue encima. y yo no abrí jugando esa noche.
Tenía un dedo inflamado, pero el director del equipo me dijo que si le hacía falta un emergente me iba a llamar. Y así fue, vine de emergente y conecté un jit que me dio el título de bateo en ese histórico certamen”.
