Estaba detenido desde mayo en un centro del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas.
Roylán Hernández Díaz, un migrante cubano de 43 años, que llevaba cuatro meses detenido en el Richwood Correctional Center, de Louisiana, falleció mientras estaba bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Hernández cruzó la frontera en mayo pasado a través de El Paso, Texas junto a su esposa. Ambos fueron detenidos, pero a ella la liberaron un mes más tarde y él fue enviado a Louisiana, donde permaneció hasta su muerte.
La viuda de Hernández asegura que supo de su muerte el martes, cuando poco después de las cuatro de la tarde, un oficial de ICE la llamó por teléfono y le dijo “lamentamos informarle que su esposo Roylán Hernández murió bajo nuestra custodia”.
De acuerdo con la información que no ha sido confirmada por las autoridades, compañeros de celda declararon que Hernández se había pronunciado en huelga de hambre para llamar la atención y por ello fue recluido en una celda de castigo cuatro días atrás.
Los mismos detenidos aseguran que – aparentemente- el migrante les había advertido a los guardias de seguridad que si no atendían sus reclamos con el debido proceso, se quitaría la vida y finalmente un oficial de la correccional lo encontró muerto.
Familiares entrevistados por el diario El Nuevo Herald, indicaron que en el momento de su muerte este se encontraba en un área conocida como “El Pozo” a donde son llevadas las personas que a juicio de los directivos del penal acusan mal comportamiento.
El comunicado enviado por ICE al rotativo que se edita en Miami confirma que la causa de la muerte es “estrangulamiento autoinfligido, sin embargo indicaron que el caso del antillano de 43 años de edad se encuentra “bajo investigación».
Fuente/Foto:Telemundo/El Nuevo Herald
