El número de vuelos diarios ascenderá a más de 100.
Con el inicio de los vuelos regulare entre Estados Unidos y Cuba, los precios del pasaje dismunirá entre el 40 y 50 por ciento, al aumentar el tráfico aéreo entre ambos países y por ese concepto el costo de los impuesto de aterrizaje.
A falta de vuelos comerciales de las grandes aerolíneas, los viajes entre ambas naciones se realizan en naves fletadas, pero trandose de salidas desde Estados Unidos, Cuba impone una tarifa de aterrizaje de $73 a $148 por pasajero.
Si el vuelo es gestionado por una empresa chárter estadounidense, para que el mismo avión totalmente ocupado pueda posarse en la pista del José Martí se deben pagar cerca de 24 mil dólares según el periódico Tampa Tribune.
En un informe reciente, la entidad de análisis con sede en Miami Havana Consulting Group, calculó que las aerolíneas comerciales podrían entrar en el mercado de la mayor de las Antillas cobrando entre 150 y 250 dólares por cada boleto.
En virtud del acuerdo sobre los vuelos comerciales de Estados Unidos a Cuba, que prevé hasta 110 vuelos diarios a la isla, hasta siete mil 300 aviones podrían aterrizar en La Habana en el transcurso de un año, a partir de septiembre próximo.
