Ellos se despidieron en la tarde del 27 de marzo de 2019 al concluir una visita histórica a Cuba.
Curiosa y simpática foto de la estancia de cuatro días de sus Altezas Reales Británicas en La Habana.
Carlos de Gales y Camila de Cornualles fueron despedidos en el aeropuerto internacional José Martí luego de cumplir tres intensas jornadas que les permitió conocer la historia, cultura y principales proyectos científicos y ambiental de Cuba.
El presidente cubano Miguel Díaz Canel, sostuvo una entrevista con ambas personalidades en un ambiente cordial y de intercambiaron acerca del positivo estado de las relaciones bilaterales, basadas en la cooperación y el respeto mutuo.
Sus Altezas Reales recorrieron zonas de la Habana Vieja, Patrimonio Mundial de la Humanidad, y participaron en una cena ofrecida por el jefe de Estado anfitrión y una presentación de ballet en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso.
Los distinguidos invitados asistieron a una exhibición de autos clásicos ingleses, visitaron la estatua de John Lennon en el Vedado capitalino y estuvieron en la inauguración de un proyecto constructivo en la Zona especial de Desarrollo de Mariel.
El príncipe Carlos de Gales visitó el Centro de Inmunología Molecular de Cuba (CIM) donde se desarrollan biofármacos destinados al tratamiento del cáncer y otras enfermedades autoinmunes, según la Agencia Cubana de Noticias.
Por su parte la duquesa conoció en la sede de la Federación de Mujeres Cubanas de la labor que se realiza en el país contra la violencia de género en la última jornada de la primera visita oficial de miembros de la familia real británica a la isla.
Cuba fue la sexta parada de la pareja real británica en una gira por el Caribe en la que ya visitaron las ex colonias inglesas de Santa Lucía, Barbados, San Vicente y las Granadinas, Saint Kitts y Nevis, y Granada, y las Islas Caimán.
Sus Altezas Reales arribaron a la capital de la mayor de las Antillas el domingo 24, y una de sus primeras actividades fue rendir homenaje al Héroe Nacional José Martí y acceder al Memorial ubicado en la Plaza de la Revolución.
En todo momento de sus encuentros con la población, lo mismo en sus paseos por la capital como en los recorridos e intercambios en lugares de interés económico, científico, cultural y social, el matrimonio contó con el cariño y respeto de los cubanos
